¿Más cerca de Skynet?
La supercomputadora creada por Microsoft, basada en Azure y dotada de 285.000 procesadores es una de las cinco más potentes del mundo, y la ha cedido para uso exclusivo de OpenAI, la organización de investigación de inteligencia artificial ‘fuerte’ que Elon Musk ayudó a fundar hace unos años. Oportunamente, habíamos informado sobre la alianza entre Microsoft y OpenAI para desarrollar Inteligancia Artificial General.
La demostración
Kevin Scott (director de tecnología de Microsoft) y Sam Altman (CEO de OpenAI) nos muestran en un vídeo un ejemplo de creación automática de código: en el mismo, el programador inicia la escritura de un método en código Python, añade un comentario explicando en lenguaje natural no lo que hace el código ya escrito, sino lo que debe hacer el código que falta… y la inteligencia artificial lo genera.
Dentro de los rectángulos rojos, el código “autocompletado” por la IA a partir de unas pocas líneas escritas por el programador.
Y si algo falla, el programador sólo debe rehacer el comentario para ‘explicarse’ mejor. Pero no sólo es capaz de elaborar código a partir de lo escrito por el desarrollador humano, sino también de evitar generar código superfluo: en el vídeo vemos cómo hace uso de otros fragmentos de código previos, co-creados por hombre y máquina.
“Todo esto prueba que este modelo es capaz de generar sugerencias de código útiles y ajustadas al contexto, que lograrán que cualquier desarrollador sea más productivo (…) y le permitirán pasar menos tiempo en repetitivos y largos procesos de codificación y centrarse más en los aspectos creativos de la programación de software”.
La demo ha maravillado a algunos y disgustado a otros. Para leer los numerosos y variados comentarios, te recomendamos ver el video en Youtube.
Fuente: TyN Magazine.